Crónica de un mal día de caza

Y digo mal día por el calor, el terreno seco y las pocas liebres de este magnifico corredero, pero en este sitio se esperaba que hubiera pocas liebres, lo castigaron mucho hace unos años y no se termina de recuperar. Vimos unas 10 o 11 liebres, se corrieron 7  y se mataron 4.

En trailla Pimienta y Pakera, dos hermanas que lo hicieron bastante bien el primer día. Tras ver la liebre en la cama y salir sin poder avisar suelto y en carrera de 01:44 Pimienta le da un baño a su hermana. Pimienta como en su primer día llega varias veces a liebre con facilidad, aunque creo que le faltan finales. Tiene un minuto y medio muy bueno, su hermana Pakera, apática en el día de hoy aguantaba como podía el ritmo de su hermana, por cierto, la liebre se fue a criar.

Es hora de volver a la cuerda, tardo tanto en llegar que me pierdo la carrera entre Guti e Higuain . Carrera en torno al 01:10 donde los dos machos en un tuya- mía no dan ninguna opción a la liebre a la que dan muerte. Esta carrera no la puede ver, pero si vi la de Guti con una perra de un compañero que nos pidió el perro para correr. Guti ¡quien te a visto y quien te ve!. Formidable demostración del perro en carrera de 01:31 con un ritmo muy alto de carrera llegando al menos 10 veces a liebre antes de dar muerte a la rabona. La perra con la que corrió nada pudo hacer. Guti tiene un correr muy bonito, con la cabeza pegada al suelo. El año pasado era un perro duro al que le faltaba paso ( faltó muy poco para darlo pero mi amigo lo dejo por mi) y aunque aún es pronto, el perro parece otro.

La cuarta collera era turno para Chana y Emaná. Este último hermano de camada de Higuain, Pimienta y Pakera, donde a las 11:55 le tocó una liebre valiente que en carrera de 03:10 pusieron a los perros al limite. En esta carrera sale por delante Emaná y aunque le cuesta llegar a liebre una vez que lo hace ésta se monta en un camino abriendo bastante hueco a los perros. Chana toma la delantera y el macho queda descolgado, en un alarde de fuerza va de menos a más, se pone parejo a la perra y la sacan del camino. Aquí empezó el espectáculo, donde cada vez que llegaban (siempre el perro se salia de la perra), la liebre abría hueco pero le volvían a llegar con fuerza y codicia. En uno de los alcances el perro muerde liebre pero se le escapa y tras 2 o 3 llegadas más le dan muerte. Emaná es la segunda liebre que corre en su vida y me gustó bastante.

Quería comentar que en el día de hoy nos acompañaron las cámaras de canal sur para el programa reporteros y aunque no fue el mejor día por las pocas liebres que hubo la experiencia fue inolvidable ¡muchas gracias!