La historia de Salada es la historia de una cuadra en particular, es el santo y seña de la amistad de dos personas y la continuación de una reata que está haciendo méritos propios para ser la referencia a nivel galguero.
Salada nació junto a otros 6 hermanos el día 20 de Mayo de 2001. Esta camada se elaboró fruto del nacional de 2000, donde una perra llamada Morix y otra de nombre Sevilla, habían hecho las delicias de los aficionados en el corredero vallisoletano de Nava del Rey. Sevilla de nuestra propiedad, tenía una hermana de una calidad muy similar, de nombre Samba, de hecho se enfrentaron en las semifinales del local de Toro, teniendo que correr 5 liebres entre ellas para ver cúal de las dos la dábamos por ganadora, en la quinta liebre de 3´23” Sevilla se mostró superior y ahí se forjó su camino para el regional y posteriormente para el nacional.
Samba se cubrió con un semental que por aquel entonces no era conocido y que jamás había cubierto, de nombre Chomin, hermano de Morix y propiedad de Zarin y Felix. Esto es muy normal en nuestra cuadra como habrá comprobado la gente, solemos cubrir con sementales que no han cubierto nadie y que posteriormente se demuestra su capacidad reproductiva, véase el caso de Chomin, Bravo, Feo, Legendario de Cebollas, Harry, etc. El por qué, es secreto profesional pero podemos dar una pista más y es que jamás volvemos a cubrir con el mismo semental y hasta ahí puedo leer...
Lo primero que podemos destacar es que cuando la camada de Salada, Sosa, Guinda, Torito, etc contaba con 4 meses sufrimos un robo brutal de toda la cuadra, solo nos quedaron, esta camada y a nuestra idolatrada Moza (madre entre otros de Sevilla, Samba, etc). Lo que no sabían los cacos es que pese a haberse llevado 11 ejemplares y que dinamitaban toda una temporada, nos quedaron el motivo para seguir en este afición de locos, es decir, nos dejaron lo que mantendría la cuadra y la ilusión.
Con 9 meses Salada y Sosa corrieron su primera liebre en Enero de 2002 con un macho Greyhound y vimos lo que teníamos que ver, que el perro les paró la liebre 5 veces a las hembras y a partir de ahí, las mismas se mostraron impecables para la edad con la que contaban. A partir de aquí se guardaron y siguieron entrenando día tras día, hasta que llegó el mes de Junio de 2002 y Zarín se presentó en nuestra cuadra y se llevó a Sosa y a Guinda. Por lo que nos contó, las dos andaban muy parecido pero Guinda tenía un carácter que la incapacitaba para la competición y que aunque el de Sosa no era el ideal, sería la que pondrían ese año. Es curioso que Zarin no se llevó a Salada porque estaba coja cuando vino a verlos, sino ahora mismo estaría en su casa.
Salada siguió entrenando hasta que llegó el 12 de octubre de 2002 donde corrió su primera liebre y la única que correría a la postre antes de iniciar el regional. ¡Qué espectáculo! Su primera liebre de 4’ 02” en La Unión de Campos, corría con una perra de nombre Verdina, que parecía mala y que posteriormente demostró gran calidad y que solo tuvo la mala suerte de estrenarse con Salada. De ahí hasta noviembre, con el inicio del regional no corrió ni una sola liebre más. Se inició el regional y en primera ronda (después de quedar exenta en dieciseisavos) elimina a la perra que ese año representaba al CNGE, una perra de Cuenca que traía vitola de campeona. Ganó fácil y paso a cuartos, donde se enfrentaría a la perra negra que hija de Zar, representaba a Castillo de la Mota, no la dio opción tampoco y ganó 2-0. En semifinales nos tocó con Lerma Mulas, una perra barcina que estaba gustando mucho y el resultado fue el mismo 2-0 y llegó la final…. Tiene narices, y le tocó con nuestro Feo. Feo había tenido un regional mucho más duro, con preliminares, muchas liebres y puntos perdidos y aún así como saben, en la final dió la cara y le puso las cosas difíciles, sobre todo en la primera liebre a Salada.
Por aquel entonces recibíamos información de que Sosa iba hacia adelante en Castilla la Mancha y que en semifinales había eliminado a Revoltosa y que se enfrentaría en la final a la todo poderosa “Poderosa”, valga la redundancia. Pues bien, como todos saben ganó Sosa y se vería junto a su hermana en el nacional de Medina del campo.
En el nacional la historia ya la saben, perdió en semifinales con la superdotada Tara, pero ¿cómo perdió?, con toda la dignidad del mundo y dejando bastantes dudas de su derrota entre los aficionados. En esta eliminatoria me gustaría destacar que además Salada corrió con unas décimas de fiebre, 39,4 º C, no es ninguna excusa, y jamás lo hemos contado, pero la perra se lo merece que ahora lo hagamos.
En mayo de ese mismo año mi hermano pequeño, nos sugirió la idea de hacer una web de galgos, algo inédito en este mundo y que como tantas veces, creo que fuimos pioneros y que los aficionados y no yo, podrán valorar a lo largo del tiempo. Nacía, como no, Galgosalada, en honor a ella y nacía un proyecto que a día de hoy sigue apostando por la difusión de este deporte en los cinco continentes.
Pasó el tiempo a raíz de ese nacional y pese a recibir ofertas desorbitadas para aquella época, Salada permaneció en casa. Entrenamos para ese año varios animales, sobre todo machos y llegó la nueva temporada y mientras íbamos probando, veíamos que no tenían nivel, Salada seguía en la cuadra como última opción y como a todos los campeones, le llegó su hora. Lo demás no valía y teníamos que echar mano de la campeona, se la corrió una liebre la semana antes de empezar a competir, otra señora liebre, de 3´58” y pese a no estar al 100% lo hizo muy bien. El primer día corrió con una perra barquillo de León excelente, que le ganó un punto y la tuvo contra las cuerdas. Fue pasando rondas hasta semifinales, ganando más o menos fácil. En semifinales se enfrentaba a Palomo, galgo de la familia Martín de Villaexcusa que lo estaba haciendo muy bien y ahí es donde Salada, ya bien puestita, hizo una exhibición de cómo se pueden a las liebres de Madrigal. En la final con la perra negra de Generoso (Zaranda), de mucha calidad, dio una nueva exhibición y se clasificaba de nuevo para el nacional, con el objetivo ya cumplido. Para nosotros ese nacional no tenía ninguna importancia porque sabíamos que las liebres no la favorecían nada y se destaparía mucho con las mismas. Salada es la única galga que se ha clasificado dos veces para el nacional corriendo los dos regionales en Madrigal, eso lo dice todo, eso es razón suficiente para ser, en nuestra opinión, una de las mejores perras que ha pasado por nuestra región y por España. Les desaconsejamos que hagan la prueba, es decir que intenten conseguir dicha azaña, ya que los galgos quedan bastante tocados “de todos los sitios”. Por tanto después de 2 años en competición Salada había corrido 21 liebres el primer año y 24 el segundo, es decir, en total 45 liebres, 9 en nacional de Medina, 2 en el nacional de Barcience y 34 en Madrigal de las Altas Torres.
Siguió pasando el tiempo y cubrimos con el macho que más nos había gustado en ese año del nacional, del cual se hablaría en el futuro más que mucho, se llamaba Bravo y cubrimos con el por dos razones: porque tenía mucho paso y porque la morfología de su hermana cocinera y de él mismo eran ideales para Salada. De esa camada nacerían perros que a día de hoy son protagonistas por si solos del panorama galguero, como Salao que ya ha dado varias campeonas/es (Morucha, Judas, Estrella y Canastero), Pelícano (padre de Devora nacional de 2011), Torera (semifinalista 2009), etc. Ese mismo año Salada corría el primer campeonato de España de galgos veteranos y se clasificaba para la final pese a correr con galgos mucho más jóvenes que ella y a pasar todo el campeonato de Écija, con una infección en una de sus patas que la impedía recuperarse de una a otra carrera. Este sería el cierre de su más que dilatada y provechosa carrera deportiva.
Posteriormente Salada parió de Rifle y de esa camada de extraordinaria calidad, Macarena corría el nacional de 2010 y Carbonera las semifinales de Castilla la Mancha. Después se cubrió de Sombra, posteriormente de Feo, más tarde de Islero y en la actualidad se encuentra Parida de Chulín.
En todo este tiempo lo menos importante ha sido Salada, lo verdaderamente significativo ha sido la amistad fraguada entre dos amigos de los de verdad, de los que están para los galgos y para lo que no son los galgos, de los que están para lo bueno y para lo malo, el padrino de su boda y el eterno admirador de una gran persona que es Miguel Angel y que lo merece todo en el mundo del galgo. Los que hemos tenido la oportunidad de convivir con él podemos corroborar la dadivosidad que regala y la capacidad para hacer fácil lo difícil. Para él y para Salada vaya este pequeño homenaje de un admirador de los dos.
Muchas Gracias por todo Oscar.
Juan Carlos Gómez Prieto
