Biografía de Mariposa por Luis Sanz

Cuando nos juntamos los galgueros en tertulias para hablar de galgos siempre estamos contando historias y anécdotas de nuestros galgos que nos llenan de alegría y recuerdos, son galgos que no son los grandes galgos campeones conocidos por todos pero son nuestros galgos. Todos los galgos tienen su historia particular y os voy a contar la historia de Mariposa, galga de Oscar de Galgos y Cotos de la cual tiene un hijo Juanca y por eso tiene cabida en este blog.

La madre de Mariposa se llama Gala, Gala es consanguínea en Anita ya que sus abuelas son hermanas de camada, Anita y Pastora (madre de Malaespina), Gala es del mismo color que Mariposa que es un color muy típico en los galgos de Torrejón de Ardoz al igual que el blanco sucio (Anita) teniendo en cuenta sus caracteres muy fijados de sus ancestros (Corzo y Cosius). Gala es una perra que en su época de corredora era muy completa y con muchas facilidades, la galga tenía un gran defecto y es que es muy arisca, había veces que el arisco llegaba a sacar de quicio y dos días se quedo en el campo entrenando y tener que ir posteriormente a por ella porque no había manera de cogerla. Al ser tan arisca nos planteamos no criar de ella por considerar que es un factor tan heredable que iba a dar problemas, pero por otro lado la perra era buena corriendo y sembraba dudas, después de darle mil vueltas y llegando a la peculiar consideración que prefiero ganar un punto corriendo aunque luego la amarre mal tras la carrera que perder el punto y cogerla bien se decidió criar de Gala. Había que buscar macho y en un pueblo cercano tenían un galgo procedente de Castilla y León que sus hijos eran muy interesantes y en concreto nosotros teníamos una hija que nos gustaba bastante, el galgo se llamaba Rebelde y uno de sus hijos más conocidos era Carabota, ya que Carabota era nieto de Anita (el padre de Gala y la madre de Carabota eran hermanos de camada) decidimos hacer un cruce muy parecido al que ya se había hecho con buenos resultados. Posteriormente vimos los buenos resultados, Gala, ha criado cinco camadas más posteriores a la de Mariposa, dando hijos como Lara y Sotaldeña representantes de Madrid del Nacional de Barcience donde gano Deseada y también Brendo que es el padre de Duquesa de los Molares, Duquesa es bien conocida en Andalucía ya que gano a Yuma en los provinciales cuando esta ultima defendía el título de Campeona de España, y actualmente hay 3 camadas de Gala para próximas temporadas.

El parto donde nació Mariposa fue muy numeroso, 13 perros, y nos quedamos con dos hembras, intentamos quedarnos con las menos ariscas y mas simpáticas, eran Mariposa y Curra, posteriormente a Curra cuando tendría unos 10 meses “se la cruzaron los cables” y saco el ramalazo arisco. Las dos galgas se presentaron en campeonatos sociales para clasificarse para los provinciales y los ganaron las dos y representaron Curra al club “El 93” de Guadalajara y Mariposa a “La Noguera” de Madrid. Las características de las perras corriendo eran totalmente diferentes, Curra había nacido con unas facultades innatas para correr pero no tenia “la cabeza” bien amueblada, era rarita, corría mucho pero no era agresiva, Mariposa era todo los contrario no tenia las facultades de su hermana pero era todo codicia y corazón, Mariposa corría mas con el corazón que con los pies, le ponía muchas ganas.

Al empezar las eliminatorias del campeonato social Mariposa marco su línea, las quería a todas, si salía una liebre “normal” se la comía, era intratable, muy buena técnica y colocación
en los alcances y aplicaba a rajatabla la traducción que aplican los ingleses al hablar de codicia: “quiere la liebre para ella sola, no la quiere compartir”, pero cuando salía una super liebre se veía que la faltaba algo, poco pero algo. Estaba claro que esta galga en Madrigal de las Altas Torres habría sufrido pero en correderos de la zona centro o sur se adaptaban mejor a ella. Al correr en el provincial la perra fue a más y empezamos a disfrutar realmente de ella. Al correr semifinales del provincial en Tembleque se dio la circunstancia que la collera iba enganchada mientras se rodeaba una viña pegada a la carretera de Mora y salió la liebre hacia allí y una suelta errónea hacia la viña hizo que las perras fueran de cara a ella al salir de la trailla cuando van a tope y Mariposa desconocía lo que era una viña (en los campos de entrenamiento y en los correderos que ella había corrido no hay ni una) y entro ciega como si fuera hierba alta la viña y en la primera fila dejamos de ver a la perra para ver las patas por el aire, se había estrellado con la viña, y la liebre siguió corriendo defendiéndose de los galgos lo que hizo que en una pequeña parte de la viña que esta emparrada se chocara de nuevo dos veces contra el emparrado.

Al terminar la carrera estaba hecha polvo, la orina eran excesivamente sanguino lenta y la veterinaria dijo que se había tocado el riñón en uno de los choques de la viña, la perra cuando salían liebres las quería correr todas y hablamos con la veterinaria para que no nos la retirara pero la naturaleza es sabia y perdió esa eliminatoria corriendo fatal. Como dice un gran galguero: “ en los galgos no es que hay que tener suerte, lo que no hay que tener es mala suerte”. Tras un tratamiento y un reposo oportuno Mariposa volvió a hacernos disfrutar hasta que tras el papel que habían hecho tanto ella como su hermana en los provinciales recibimos una oferta por las dos perras y se las llevo un aficionado extremeño. Hasta aquí es lo que se puede contar de Mariposa en primera persona, lo que voy a contar ahora es por oídas: Mariposa la tenía en su casa un galguero de Castilla y León al que fue a visitar Oscar de Galgos y Cotos (creo que a cubrir con un perro) y la galga cambio su residencia a la finca del Duende. De su primer cruce en su nueva cuadra nació Destino, el galgo que le ha dicho a Juanca que quería saber la historia de su madre que si bien no fue una campeona también tendría su historia y quería saberla.

Una vez más quiero agradecer a Luis Sanz su colaboración con este blog, contando una historia que a todos los galgueros nos encantan, ¡MUCHAS GRACIAS LUIS!