Sucesos inexplicables suelen formar parte de la vida de cada persona. En los galgos no iba a ser menos. Sucesos que le llamamos destino, mala suerte o un sin fin de nombres intentando buscar alguna explicación lógica de lo ocurrido. Cuantas veces nos han pasado cosas y hemos dicho: ¿Por qué?. Son dos simples palabras que detrás de ellas casi siempre no encontramos un significado. Son muchas las vueltas que le damos a la cabeza intentando buscar ese significado a todo lo ocurrido, pero lo que si es verdad es que cuando pasa algo ya no hay solución posible...
Este texto va dedicado a todos esos galgos que por culpa del "destino" o de la "mala suerte" dejaron su vida detrás de una liebre o que un accidente les privó de su valía en el campo. Ahora mismo se me viene a la cabeza ese galgo con 12 meses que pusimos de nombre
"Troni". Ese galgo que corriendo con Jacinta y Fernanda dejó su corta vida en ese olivo aquel maldito día, no murió en el acto, pero lo dejó invalido de por vida.
Imagino que mi amigo Félix Torresano se habrá preguntado muchas veces esta misma pregunta que hice antes. Imagino que aún piensa en como fue ese fatídico accidente en el que murió su perra
Pandora. Al igual que Dorita con su
Lancerita. Si hubiese sido buena o no nunca se sabrá, pero lo que si sabemos todos es que la vida no le dio esa oportunidad de demostrarlo.
Mi amigo Antonio Roman sabe muy bien también lo que es pasar por esta situación, su galgo ya de avanzada edad dejó su vida en la carretera, seguro que no se merecía morir así.
No creo que mi amigo Bolero cuando se levantó aquel día para ir a cazar imaginaba un día tan nefasto de tan mala suerte con la muerte de su perro y la lesión de la otra perra. No creo que se mereciera tal castigo de la vida, seguro que algún día ésta le devolverá lo que en su día le quitó.
Estirpe, que de recuerdos se le tienen que venir a mi amiga Rocío al recordar a este perro. Aquella carrera, esa liebre......todo estaba preparado para que la vida de este galgo acabara en un trágico accidente. Que cruel es el destino a veces.....
Pablo Medina, cuando era solo un niño vivió de cerca la perdida de su perra y como decía en su entrevista "me pegué llorando una semana" aquello le marcó, pero seguro que también aprendió.
Los foreros Comunero y Moreno Castellano han pasado también por esta experiencia al igual que Pedro Montes, que sabe muy bien lo que es tocar la gloria con
Tara y vivir la triste perdida de
Divina.
Muchos galgos quedaron en el camino. Algunos nunca tuvieron la oportunidad de demostrar lo que llevaban dentro. Otros murieron justamente para lo que vinieron a nacer y en otros casos un fatal accidente acabó con sus vidas. Desde aquí les recuerdo porque ellos también forman parte de este deporte y seguro que cada uno dejó su mensaje. Aunque sigamos preguntándonos el por qué, ellos dejaron bien claro que ninguna muerte es en vano. En algunos casos demostraron que si se tiene que morir para conseguir lo que se quiere.....¡SE MUERE! El cielo también es para ellos.
